Una técnica de carrera correcta nos ayudará a mejorar en la calidad del esfuerzo que hacemos al correr. Si deseas mejorarla necesitarás practicar algunos ejercicios de técnica.
Estos ejercicios tienen la misión de corregir las posturas y los movimientos erróneos que cometemos mientras se corre, Fortaleceremos músculos, ligamentos y tendones, y generamos un ahorro energético, además una gran ventaja de los ejercicios técnicos es su amplia variedad, por lo que puedes ir combinándolos para no repetir siempre los mismos y así poder asimilar cada una de las fases de técnica de carrera. Estos son algunos de ellos.
1 – Correr hacia atrás
Correr de espaldas es uno de los ejercicios técnica de carrera más sencillos. Para llevarlo cabo, primero hay que vigilar que detrás tuyo no haya otros corredores u obstáculos que puedan causarte un accidente durante su práctica. Después, recorre unos 100 metros pisando con la zona medial del pie (metatarso) a la vez que flexionas las rodillas y haces un ligero braceo.
¿Qué se trabaja?
Fortalecimiento del tendón de Aquiles. Al correr hacia atrás, el tendón de Aquiles hace de muelle y el pie rebota para realizar el siguiente paso.
Más movilidad de la cadera y potenciación del glúteo mayor. Si los pasos hacia atrás son largos, conseguirás una máxima extensión de la cadera a la vez que trabajas el glúteo mayor, el músculo responsable de dicho movimiento.
2 – Carrera lateral
Con los brazos ligeramente separados del tronco y sin abrir demasiado los codos, se trata de hacer pequeños saltos laterales con un ligero contacto de los tobillos de ambos pies en el punto de máxima elevación. Procura que los talones no participen en la pisada ni tampoco cruces las piernas. Haz unos 30-50 metros y después cambia de lado.
¿Qué se trabaja?
Mejor coordinación en el movimiento de piernas y brazos y mejora de la movilidad.
3 – Andar de puntillas
Empieza a andar elevando los talones todo lo que puedas con la espalda recta en todo momento. Haz pasos cortos a un ritmo lento y bracea tus brazos muy levemente a medida que vayas avanzando. Cuando domines el ejercicio, también tienes la posibilidad de hacerlo corriendo a un ritmo suave.
¿Qué se trabaja?
Fortalecimiento de las musculatura de los pies. Los músculos de los pies son los grandes olvidados por la mayoría de corredores. No obstante, hay un alto trabajo tanto de los músculos flexores (parte posterior del pie) como extensores (parte anterior). Andar de puntillas también ayuda a trabajar el músculo tibial anterior y los gemelos.
Posición del tronco. El ejercicio ayuda a mantener la cabeza alta y espalda recta.
4 – Andar con los talones
Con las puntas de los pies mirando hacia arriba, avanza dando pasos cortos y acompáñalos de un braceo suave a lo largo de unos 30-50 metros. Asimismo, presta especial atención en la posición de tu cadera, evitando los movimientos de esta hacia atrás.
El ejercicio debe realizarse de tres formas distintas: la primera con la punta de los pies mirando al frente, la segunda con las puntas hacia dentro y la tercera con las puntas hacia fuera.
¿Qué se trabaja?
Posición del tronco. El ejercicio ayuda a mantener la cabeza alta y espalda recta.
Fortalecimiento de los tobillos. Un tobillo fuerte previene lesiones en el tendón de Aquiles. Recuerda que es una zona con una gran carga de trabajo en las fases de apoyo e impulsión.