Uno de los grandes problemas cuando estamos en medio de la preparación para un objetivo, como por ejemplo un maratón, la recuperación posterior a una sesión de calidad generalmente es muy exigente.
Aunque el día posterior a ese ejercicio o prueba sea un entrenamiento regenerador, sino nos hemos recuperado bien, probablemente acumularemos mucha fatiga.
Dando por hecho que el descanso es uno de los pilares para cumplir el objetivo y llegar a tope a la competición, aquí algunos trucos para ayudar a la recuperación del organismo.
CRIOTERAPIA: Dependiendo de tu tolerancia al frío puedes llenar la bañera con agua fría lo suficiente como para cuando te sientes sólo las piernas queden cubiertas (algunos valientes utilizan además hielo) el periodo de tiempo es muy relativo, pero podría estar en torno a los 6-8 minutos.
HIDRATACIÓN: Una mala hidratación evitará una rápida recuperación, generalmente, en un entrenamiento de carrera no nos hidratamos lo suficiente, por lo que es importantísimo aportar agua después de entrenar.
MASAJE: Durante un entrenamiento exigente se genera un desecho metabólico que reduciremos con una sesión de masaje, además de ayudar a eliminar la fatiga muscular provocada por el sobreesfuerzo.
DUERME: Una de las mejores formas de recuperar es dormir, activándose nuestra hormona de crecimiento y acelerando así la recuperación natural de nuestro cuerpo.
ESTIRA: A menudo los receptores musculares necesitan más tiempo para poder mandar la información al cerebro, con lo que ayudaremos mucho a ese estiramiento prolongándolo durante unos segundos más.
COMER BIEN: La ingesta de carbohidratos y proteínas después de un duro entrenamiento será fundamental para optimizar una buena recuperación muscular y asegurar una buena reposición del glucógeno muscular.
COMPRESIÓN: Estas prendas buscan comprimir los vasos sanguíneos más superficiales aumentando así el flujo sanguíneo profundo, esto nos llevará a una mejor oxigenación y recuperación de la musculatura.